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A 9 años del primer NI UNA MENOS.
A nosotras también nos cansa andar diciendo “ni una menos”, pero van pasando los años y cada día es una más. Solo te voy a pedir que te tomes cinco minutos de tu día y le preguntes a una mujer de tu familia si en algún momento de su vida, ha sufrido algún tipo de abuso o violencia. Te aseguro que te vas a sorprender. El feminismo no es una moda, es continuar con la búsqueda de igualdad de las que no pudieron lograrlo. Es buscar justicia por esa amiga, hermana, mamá, tía o sobrina que contó su historia y nadie le creyó. Además de no creerle, la juzgaron y la tildaron de exagerada. Es buscar justicia por esa mamá que realizó la denuncia por violencia de género, pero por los “tiempos administrativos”, no llegaron a evitar su femicidio. El feminismo es visibilizar lo que el sistema quiere ocultar. No te dejes engañar, antes no había paz, había silencio. Pero eso se terminó, porque nosotras somos la voz de las que ya no tienen voz. Se lo debemos a ellas que salieron y no volvieron; se lo debemos a la nena que se subió al remis y sufrió un abuso que marcó su vida; se lo debemos a las madres que esperan por sus hijas y a los niños que lloran a sus madres. En cinco meses del año, asesinaron a más de 120 mujeres, decidieron por ellas y les arrebataron su vida. Basta de dejar para después, una deuda que viene de hace años creciendo a gran escala, basta de mirar para otro lado. Que el privilegio, no te nuble la empatía. La imagen que acompaña el escrito, es un dibujo de Luisana, alumna de artes visuales en Bragado, que hace alusión al lema; “Nos quieren enterrar, olvidan que somossemillas”.-
