

Eugenia Gil salió a responder con firmeza a quienes, según sus palabras, son “los detractores de siempre”. Lo hizo recordando que las acciones vinculadas a la prevención y gestión de emergencias no son nuevas ni improvisadas, sino fruto de un trabajo sostenido en el tiempo. Jorge Castillo con su equipo y pares, salieron a recorrer los barrios afectados por el temporal. Ante la consulta , desde este medio pudimos comprobar con algunos vecinos, que la senadora Gil hace bastante tiempo viene cooperando en el barrio Fátima. Las fotografías de ayer podrían tomarse como un llamado a la consciencia.
“Siempre estuvimos”, remarcó, al enumerar la ordenanza del Comité de Crisis y el convenio firmado con la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) durante la gestión anterior, acuerdos que —destacó— siguen siendo herramientas válidas para el presente. Gil subrayó que en aquel entonces se trabajó con profesionales de la Facultad de Ingeniería de la UNLP, los mismos que elaboraron el plan de obras tras la trágica inundación en La Plata, lo que da respaldo técnico y seriedad al proceso.
En su intervención, también señaló que la actual gestión, pese a las dificultades climáticas que atravesó Bragado, “no levantó el teléfono para ponerse en contacto”. Según explicó, el costo de retomar esa vinculación rondaría los 500 dólares, un monto que calificó como perfectamente abordable para las arcas municipales.
Con tono crítico, apuntó: “A veces no digo que no se quiera hacer, lo que no hay es gestión”. De esta manera, insistió en que todo lo necesario ya está diseñado y disponible, sin necesidad de inventar nuevas soluciones ni caer en la improvisación. En relación lógicamente a la ausencia del municipio.
Para Gil, lo de ayer —en alusión a los candidatos en el medio dela agua— no fue un hecho aislado ni una simple foto política, sino la continuidad de un trabajo que vienen haciendo, y que al menos buscan dar algunas respuestas concretas ante situaciones climáticas cada vez más frecuentes y adversas.
