

En la previa de las semifinales de la Liga Bragadense, Mechita vive un presente especial. Vuelve la hinchada, vuelve la ilusión y también vuelven jugadores que crecieron en el club. Entre ellos, Rodolfo Butrón, uno de los referentes del plantel, que no oculta su orgullo por volver a vestir los colores que ama. En esta entrevista, repasamos con él el presente del equipo, la emoción personal y el valor de jugar por los colores del pueblo.
—Rodolfo, ¿cómo estás viviendo esta etapa en Mechita?
—Muy contento. La verdad es que volver a jugar en el pueblo, defender los colores que uno ama, es una alegría enorme. Esto es lo que siempre quise. Además, el equipo se armó muy bien: el Vochita y el Gallego lograron formar un grupo muy unido, y eso es clave para todo el año. Volvieron muchos chicos que estaban afuera, y lo mejor es que somos todos de Mechita. Eso se siente y te da un plus cuando salís a jugar.
—¿Cómo ves al equipo de cara a esta semifinal con Salaberry?
—Con confianza. Tuvimos buenos partidos que nos hicieron creer que podemos competirle a cualquiera, siempre que estemos ordenados y concentrados. Ya lo demostramos en cuartos, contra un rival directo, y lo sacamos adelante. Sabemos que Salaberry también tiene experiencia, pero vamos con la misma mentalidad: partido a partido, como si fuera una final.
—¿Cómo estás vos en lo personal?
—Muy bien, la verdad. Volver a vestir esta camiseta me pone feliz. En otros equipos competía y quería ganar, claro, pero no era lo mismo. Acá juego en mi pueblo, con la gente que quiero, y eso cambia todo. Físicamente los años pasan, pero sigo entrenando cada vez que puedo. Si no llego a la práctica, me muevo en casa, con la bici o salgo a correr. Trato de estar siempre a la altura y dar lo mejor.
—Están también en cuartos de final de la Copa Bragado, lleva el nombre de Yuli Butron…
—Sí, nos toca San Martín ahora. La Copa lleva el nombre de mi tío, y eso también me llena de orgullo. No lo vi jugar, pero en los picaditos del barrio o en los veteranos ya te dabas cuenta de la clase de jugador que fue. Esta copa tiene un valor especial para todos, y vamos a darlo todo para dejarla en casa.
—¿Y cómo sentís el acompañamiento de la gente?
—Es impresionante. En cada cancha que jugamos, la gente se hace sentir. Que vuelva la Banda de Mecha también es un empujón enorme. Escuchar los bombos, verlos al costado de la cancha… eso te levanta. Todo el plantel está muy agradecido por ese apoyo. La gente está apoyando mucho
