
En un contexto marcado por la creciente preocupación por posibles inundaciones en Bragado y la región, el vecino Oscar Greppi —quien recientemente se apartó del espacio de Daniela Monzón junto a otros referentes locales para conformar un nuevo colectivo vecinal— difundió un duro y bien documentado diagnóstico sobre los riesgos hídricos que enfrenta la zona.
Apoyado en registros históricos del Servicio Meteorológico Nacional (SMN) y aplicando el método Hershfield —una herramienta utilizada en ingeniería hidráulica para estimar la Precipitación Máxima Probable (PMP)—, Greppi presentó un escenario alarmante: lluvias intensas, cortas y cada vez más frecuentes, consecuencia directa del proceso de «tropicalización del clima» en la pampa húmeda.
«Esta tropicalización del clima va en aumento y si no nos preparamos puede resultar peligrosa para nuestra sociedad», advirtió Greppi, en lo que calificó como la «Parte 1» de una serie de análisis centrados en la necesidad de anticiparse a eventos climáticos extremos.
Uno de los puntos más inquietantes de su informe es el mapa de calor generado a partir de los datos del SMN, que señala que en zonas del país el PMP puede alcanzar los 500 a 800 mm en un solo día. Para dimensionar el peligro, recordó que en Bahía Blanca llovieron 290 mm en solo 12 horas, provocando una de las catástrofes urbanas más graves de los últimos años.
«Estos eventos son catastróficos. No hay obra hídrica en el mundo que pueda evitarlos. Necesitamos planificar medidas no estructurales, no para salvar puentes o rutas, sino para salvar vidas», sostuvo el vecino.
En ese sentido, reclamó con firmeza la elaboración urgente de un Plan de Contingencia para Inundaciones en Bragado, una herramienta que —según recordó— fue implementada en ciudades como La Plata o Santa Fe recién después de haber sufrido tragedias. “No esperemos a que nos suceda. Actuemos ya”, remarcó.
La advertencia de Greppi no es aislada. Desde el sector agropecuario ya se habían encendido luces de alarma en meses anteriores. Dirigentes rurales como Martín De La Serna de Auto convocados, Carlos Gutiérrez y Félix Piscinis, de la Sociedad Rural de Bragado, habían manifestado públicamente la necesidad de abordar de manera urgente el riesgo hídrico, ante un escenario climático cada vez más inestable y con impactos directos sobre la producción, los caminos rurales y las zonas pobladas.
Greppi también cuestionó la falta de preparación oficial ante estos posibles eventos y pidió que las autoridades, junto con entidades civiles y organizaciones intermedias, detallen y comuniquen las acciones a tomar. No solo en términos de logística o infraestructura, sino en materia de prevención ciudadana, para evitar reacciones improvisadas y peligrosas durante una emergencia.
El pronunciamiento llega en un momento delicado para Bragado, cuando el aumento del caudal en la Cuesta del Salado y la falta de obras estructurales refuerzan la sensación de vulnerabilidad de muchos vecinos. La advertencia de Greppi busca encender una alarma que, hasta ahora, parece no haber sido escuchada por quienes tienen responsabilidad de gobierno.