El presidente Javier Milei terminó con el programa que impulsaba el acceso a viviendas.
A pesar de la grave crisis habitacional y la paralización de obras en nuestro país, van a
aparecer el gobierno nacional dio de baja al Programa de Crédito Argentino del Bicentenario para la Vivienda Única Familiar (Procrear) qué otorgaba préstamos para la construcción deviviendas, una de las principales políticas públicas desde su creación.
Desde ahora se permitirán «hipotecas divisibles» para proyectos inmobiliarios en desarrollo, anuncio que termina con la esperanza de miles de personas que todavía se animaban a soñar con la casa propia, quedando también más 17.000 viviendas abandonadas en su construcción. El concepto de hipoteca divisible consiste en la
posibilidad de fraccionar una deuda hipotecaria y sus garantías en varias partes independientes, esto es aplicable en desarrollos inmobiliarios donde se requiere la venta o división de una propiedad en varias unidades, como complejos habitacionales o terrenos; de esta manera, cada unidad hipotecada tiene una parte de la deuda asignada, lo que facilita la venta sin tener que liquidar toda la hipoteca. Refiere la
posibilidad de tomar créditos hipotecarios en etapas, según el avance de la obra.
Este cambio, según el gobierno nacional, es necesario para reestructurar fondos y fomentar una economía más dinámica a través del mercado privado.
