Septiembre es conocido por ser el mes de la primavera, pero también se ha establecido, hace muchos años, como el mes de la Prevención del Suicidio, con el objetivo de generar conciencia y educar a la sociedad.
Se trata de una iniciativa mundial que busca generar conciencia, reducir el estigma y promover la salud mental; Esta iniciativa,toma mayor relevancia el día 10 de septiembre, cuando se conmemora el Día Mundial para la Prevención del Suicidio, promovido por la Asociación Internacional de para la Prevención del Suicidio
(AISP) y la Organización Mundial de la Salud (OMS). El suicidio es una de las causas principales de muerte a nivel mundial, y cada año, más de 700.000 personas pierden la vida a causa de esto. Sin embargo, se puede prevenir el suicidio.
Es por eso, que durante el mes de septiembre, se realizan en todo el mundo, campañas
de concientización, talleres y actividades, dedicadas a desmitificar el tema, reducir el
estigma asociado y fomentar la salud mental y bienestar emocional.
Los trabajos de campos recabados de Instituto Nacional de la Salud Mental estiman que el suicidio es la tercera causa de muerte entre los 15 y 24 años de edad, debido a trastornos mentales como la depresión, el abuso de sustancias y los comportamientos
agresivos y perturbadores. En Argentina, diversas organizaciones y entidades de salud se suman a estas acciones con el fin de difundir información crucial sobre los factores
de riesgo, las señales de alerta y las formas de ofrecer ayuda a quienes lo necesitan. Durante todo el mes, se intensifican las actividades educativas y se promueve el acceso a recursos de apoyo, tanto a nivel local como nacional.
En los últimos dos años (2022-2024), se registraron más de 5.000 suicidios en el país.
El color amarillo, símbolo de esta campaña, tiene un origen emotivo: en 1994, Mike
Emme, un adolescente estadounidense, se quitó la vida. Era conocido por su amabilidad y su habilidad para reparar automóviles, incluyendo un Ford Mustang amarillo de 1968. Tras su muerte, sus padres encontraron una nota que decía: «No se
culpen, mamá y papá, los amo». En su funeral, sus amigos y familiares distribuyeron
cintas amarillas con el mensaje: «Por favor, no te suicides, busca ayuda». Este gesto dio origen al movimiento Yellow Ribbon (Cinta Amarilla), que se ha expandido a nivel mundial como un símbolo de esperanza y prevención del suicidio. A nivel local la
fundación Abrazos que calman, junto al psicólogo social Benjamín Islas, iniciaron
una campaña que en principio comenzó en redes sociales y está previsto continuar
con diferentes actividades, entre ellas: suelta de globos, armado de listones amarillos
y muchas actividades que con el correr de los días nos irán contando.
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septiembre 19, 2024