Platón (c. 427 a.C. – 347 a. C.) fue un autor prolífico de varias obras, y entre las más
representativas se encuentra «El Banquete».
Este diálogo ocurre en la casa de Agatón, que es quien organiza este banquete cuando se encuentra victorioso en las fiestas Leneas. Y en su casa recibe a varias personas entre las que se encuentran: Fedro, Pausanias, Erixímaco, Aristófanes, Agatón, Sócrates y, hacia el final, se invita solo Alcibiades.
Cada uno de estos personajes tiene su profesión: en primer lugar, está Fedro, que es orador, en segundo lugar, se encuentra Pausanias, que es una especie de sociólogo, en tercer lugar, se encuentra Erixímaco, que es médico; en cuarto lugar, se encuentra Aristófanes, que es un poeta cómico; en quinto lugar, se encuentra Agatón, que es un poeta trágico; en sexto lugar, se encuentra Sócrates, que es el filósofo; y, en séptimo lugar, se encuentra Alcibíades, que es militar.
Este diálogo tiene una particularidad, que es que todos estos personajes existieron en la vida real, y que salvo Aristófanes (que era considerado como un conservador en esa época), el resto tuvieron sus parejas: Fedro y Eriximaco; Pausanias y Agatón; Sócrates y Alcibíades.
Luego de tener una cena tranquila y, como ya habían tenido un banquete el día anterior, decidieron hacer una charla tranquila, y Erixímaco propone que sea en torno a que honre al dios Eros (la pregunta que subyace sería ¿Qué es el amor?).
El primer discurso es el de Fedro, quien es la misma persona que se encuentra en los
diálogos Protágoras y Fedro, y, acá se encuentra diciendo que Eros es el dios más antiguo del mundo, para esto cita discursos de la poesía, la filosofía y la ciencia, y muestra que la pasión sexual entre dos personas del mismo sexo es normal, pero como ejemplo de máxima devoción elige a una mujer que se llama Alcestis.
Fedro muestra que Eros es un dios, que impulsa a los hombres a realizar nobles acciones, e intentando salvar a su amante (aun) de la muerte, para no sufrir la peor condena de la época que era el destierro, y como ejemplo de esto pone a dos parejas que las trae de la cultural popular de la época, en las propias palabras de Fedro “a la vergüenza por las cosas feas y aprecio ante las cosas bellas” (Bqt. 178 d – 178 e): en primer lugar (su máxima devoción)
Alcestis que muere en lugar de su marido a pesar de tener a sus padres vivos llega al
Hades, y su marido, Orfeo, la intenta rescatar pero tratando de entrar vivo al Hades con lo cual tiene una muerte en manos de mujeres; en segundo lugar, Aquiles, que cuando muere Patroclo, lo acompaña y muere junto a él, por lo que los dioses ven con agrado este acompañamiento.
En segundo lugar se encuentra el discurso de Pausanias, el cual toma al discurso de Fedro, y aclara que no todo Eros es digno, por lo que distingue entre dos Eros, por un lado, está el cercano al alma, que lo denomina celeste, y, por otro lado, está el más cercano al cuerpo, al cual lo muestra cercano al cuerpo: ambos no son unitarios sino que son inseparables.
También justifica la homosexualidad griega, a partir de cómo se usa el lógos (la razón) para la relación entre el amante y el amado; y, a partir del uso del lógos (la razón) desprende el comportamiento ético de las acciones humanas, y que estos comportamientos, dependen de cómo se realicen las acciones.
En tercer lugar, se encuentra el discurso de Eriximaco, quien retoma la dualidad que
plantea Pausanias, y aclara que hay un Eros que es bueno, y que lo denomina sano, y, que hay un Eros que es mal, y que lo denomina enfermo, y muestra a través de un montón de ejemplos como se combinan la salud y la enfermedad, y, la actitud ética de Eros bueno es que busca conciliar los opuestos, en cambio, el Eros malo, tiene malas consecuencias que se derivan del mal uso del Eros bueno.
En cuarto lugar, está el discurso de Aristófanes, quien entabla el diálogo con Eriximaco, y explica la naturaleza de Eros, a través de un mito donde los hombres tenían una actitud originaria, y como tuvieron actitudes arrogantes, los dioses se enojaron, y Zeus los dividió en dos, y Apolo cosió la herida, y, a partir de este momento el acto amoroso consiste en buscar la otra mitad, para intentar retornar a la antigua forma originaria humana.
En quinto lugar, está el discurso de Agatón, quien dice que todos están en lo cierto pero no está completa su definición de Eros, ya que es necesario describir a Eros, y luego mostrar a partir de cómo se relacionan con Eros es como los hombres obtienen sus dones. Eros se encuentra siempre ocupado con la belleza exterior.
En sexto lugar, se encuentra el discurso de Sócrates, quien reproduce un discurso de
Diotima, que le avisa que eros , es un mediador entre opuestos, debido a que nació de Poros (la riqueza) y Penia (la pobreza), y como mediador empiezan por conectarse físicamente tanto el amante como el amado, para trascender lo físico, y poder llegar a concebir la Idea de Bien/Belleza/Justicia.
En séptimo lugar, se encuentra el discurso de Alcibiades, quien se encuentra con Sócrates, y, luego aclara que hablar de eros es hablar del amor hacia otra persona por lo que se encarga de elogiar a Sócrates, a partir de diversas imágenes y con mucha ironía y acidez, lo adjetiva y lo metaforiza.
Luego todos empiezan a dormirse y hasta el amanecer se encuentran hablando Sócrates,
Agatón y Aristófanes, quienes más tarde se duermen y Sócrates va a ejercer la labor
filosófica a la salida del gimnasio.
Este diálogo de Platón es una muestra de cómo se puede discrepar y establecer diversas tertulias con diferencias tanto ideológicas como conceptuales, y aun así no agredir a los demás expositores.
Para recomendaciones de Banquete recomiendo tres traducciones:
1) Juliá, V., Platón, Banquete, Buenos Aires, Losada, 2004 (es una traducción muy
técnica pero se puede leer con facilidad)
2) Mársico, C., Platón, Banquete, Buenos Aires, Miluno, 2009 (está traducido a un
lenguaje muy porteño)
3) Ludueña, E., Platón, Banquete, Buenos Aires, Colihue, 2015 (tiene el texto griego al
costado de cada página, y justifica determinada traducción de las palabras)